Mi primer mes como nómada digital

Vivir en otro país y trabajar en remoto. Retrospectiva de mi primera vez.

Jorge Cáster
De 9 a 5

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La pandemia, la posibilidad de trabajar en remoto y las ventajas de trabajar exclusivamente con un ordenador me hicieron dejar mi piso de alquiler y arrancar esta nueva aventura.

Si quieres saber como empezó todo y mis motivos para ser nómada digital, te dejo el link aquí.

En fin, mi primerita vez…

Aterrizamos en Edimburgo de noche, con equipaje de mano. Primer error: no facturar maleta. What? ¿Una cagada tan pronto? Ah, no, todavía no nos íbamos a dar cuenta del fallo.

Nos hacemos la típica foto con las letras del aeropuerto, cogemos un bus de 2 pisos y nos sentamos arriba en primera fila. UK finest experience! 🚍

Es increíble la sensación de llegar a una ciudad nueva: no conocer nada, pasear, descubrir. El primer día te cuesta horrores llegar hasta el alojamiento, pero a la semana te mueves como si llevaras viviendo allí 10 años. Vuelves a casa con los ojos cerrados, te aprendes nuevos caminos...

Qué sensación, se me pone la piel de gallina.

Llegamos al apartamento, lo habíamos elegido por AirBnB. Estuvimos comparando con algunos apartamentos/apartahoteles de Booking qué nos salía mejor de precio, zona y comodidades y (esta vez) ganó AirBnB.

¿AirBnB o apartahotel? Un futuro post.

Mis principales preocupaciones eran las habituales a la hora de trabajar lejos de la oficina:

  1. Tener mala conexión a internet.
  2. Que le pasara algo a mi pc y no poder trabajar.
  3. No tener una buena mesa/silla/lugar de trabajo.

Llevé 2 portátiles por si se me estropeaba uno, confié en mi tarifa de datos del móvil y crucé los dedos para que el apartamento fuera igual que las fotos.

Ningún inconveniente con esto 🎉

Photo by Eric Veiga on Unsplash

La ciudad

Edimburgo es una ciudad increíble. Hay mil zonas que visitar, cien planes al día y puedes alucinar en tantos sitios que solo con dar una vuelta por un nuevo barrio ya merece la pena el viaje. Fuimos a musicales, bares típicos, locales de música en directo,…

Segundo error: Querer hacer turismo todos los días.

Estuvimos 10 días seguidos haciendo cosas (por supuesto, un free tour el día después de aterrizar). Planes después de trabajar y fines de semana completos.

Maaaaaal.
No te equivoques: no estás un mes de vacaciones.

Aun así, aprendimos la lección y bajamos el ritmo, pero eso no nos impidió disfrutar de la comida local, conocer sitios increíbles, perder más de una tarde en el supermercado descubriendo delicias y fritangas nuevas.

Muy clave ir a los supermercados siempre que visitas algún país, es una forma interesante de conocerlo.

☔️ Antes de volar, miramos el tiempo por esas fechas y compramos ropa acorde a la época: chubasqueros, ropa y calzado de lluvia/frío.

Tal vez el paraguas que llevamos era muy grande para llevarlo siempre encima, pero no se doblaba con el viento. Era un maldito superparaguas.

La localización de la casa era perfecta, volvíamos casi siempre andando.

Photo by Chris Montgomery on Unsplash

El día a día

Para mí, esta es la clave de acertar a la hora de trabajar en remoto. Muchas cosas son innecesarias al viajar un fin de semana o un puente largo, pero la vida cotidiana conlleva muchos más detalles.

Algunos parecen chorradas, pero si estás acostumbrado a hacer algo de una manera, te costará cambiar de hábitos.

El colchón y las almohadas, lotería. No eran gran cosa, pero pudimos dormir bien.

La presión de la ducha era una M. No salía bien y hacía que aclararte fuera un rollo. Con lo a gusto que se está debajo de agua caliente… ahí era más una mangerita de camping que una alcachofa en condiciones.

La zona de trabajo era perfecta para trabajaor los dos, con suficiente espacio para estar a gusto. Pero no tenía casi luz. Tuve que mover una de las lámparas del salón a la mesa. Solucionado.

Llevamos un adaptador de enchufe especial para Reino Unido. Lo malo es que solo teníamos uno, así que al mover los pcs a la habitación o si queríamos trabajar fuera de casa, teníamos que echar a suertes quién se lo quedaba.

La diferencia horaria me obligaba a madrugar más. Ya sé que solo es 1h, pero soy demasiado nocturno. Me adapté a irme a la cama antes, pero al volver a España perdí esa costumbre.

No pudimos crear una rutina. No me refiero a levantarte a la misma hora y trabajar, sino a que no teníamos planes habituales como ir al gimnasio martes y jueves, quedar para tomar un café los fines de semana o asistir a alguna clase de nuestro hobbies.

Hacer turismo alrededor de Edimburgo. Aprovechando festivos en España hicimos un viaje de 4 días por las Highlands. Lo malo es que coincidía en medio de nuestro mes en Escocia y tuvimos que pagar 2 alojamientos mientras nos movíamos (el de las vacaciones y el de Edimburgo). Para el futuro, nos organizaremos y haremos viajes “largos” al final de nuestra estancia, así podemos dejar un piso para vivir en otro.

Es difícil conocer gente. Para mí, lo peor de estar solo un mes. A pesar de hacer algún tour o pub crawl, la gente que conoces está de paso.

Photo by Caroline Selfors on Unsplash

La maleta. Veníamos de haber hecho una mudanza gigante; muchas, muchas cajas. Así que decidimos ir a la aventura con lo mínimo. En cuanto a ropa no tuvimos problema, llevábamos suficiente para 8-9 días y había lavadora en el piso. Lo malo es que estábamos completamente vendidos a los utensilios que hubiera allí. Cosas como un pelador de fruta/verdura, unas tijeras, una tabla grande,… el día a día al que estás acostumbrado.

Además, no facturar maleta nos hizo no poder traer de vuelta comidas y bebidas locales por restricciones de líquidos en el aeropuerto.

Lección aprendida.

Balance de dinero

A pesar de haber gastado dinero en el piso y los vuelos, no hemos subido mucho más de lo que gastábamos mensualmente en Madrid.

También vas al teatro, al cine o a algún museo donde vivas. Comes o cenas más de una noche fuera. Sigues gastando dinero.

Por supuesto, las vacaciones a las Highlands no las cuento, ya que esas fueron nuestras vacaciones planeadas. Solo que nos quedamos un mes más en Edimburgo.

Ya que íbamos…

Conclusión

Hay muchas cosas que dependen de la suerte. Muchas de ellas tan importantes como una cama decente para descansar bien y tener luz para trabajar.

Al resto de cosas te acostumbras.

La próxima vez facturaremos maleta para poder traer cosas de vuelta sin restricciones y poder lleva un pelador 😅.

¡Gracias por leer hasta aquí!

Seguiré contando nuestras aventuras próximamente.

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Jorge Cáster
De 9 a 5
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Futurist & Tech Lover | Lead Front End Engineer @Mercedes-Benz